¿Cuáles son los 4 tesoros jamás descubiertos?

¿Quién no ha querido encontrarse con un tesoro? A lo largo de la historia de nuestra sociedad han existido muchos relatos, algunos ciertos como otros no tanto, en las que contaban la dura búsqueda de piratas, gobiernos y cazatesoros por barcos hundidos, oro en islas desiertas…  Una búsqueda exhaustiva de todo tipo de gemas, piedras preciosas o materiales llenos de valor con lo que esperaban que, de un día para otro, les convirtiesen en los más ricos del lugar.

Sin embargo, buscar y encontrar tesoros no es tarea fácil. Por eso, en Canal HISTORIA os hablamos de los 4 tesoros jamás descubiertos.

 Los 4 tesoros jamás descubiertos

Empezamos con uno que nos toca muy de cerca, el hundimiento de la flota de España del rey Felipe V en el 1715. Fueron los primeros barcos que el rey mandaba de vuelta de las Américas llenos de oro y joyas.

En el retorno, la flota se vio envuelta en una gran tormenta y se hundió en las costas de Florida, llevándose con ella las 12 naves y todos sus botines.

Aproximadamente, se calcula que el valor es de unos 400 millones de euros y hasta el día de hoy no ha sido descubierto a pesar de que un gran número de empresas dedicadas a estas búsquedas han removido cientos de kilómetros de suelo marino y lo máximo que se ha encontrado han sido 400 monedas.

El Dorado

¿Existe esta ciudad mítica? En 1617, el pirata inglés Walter Raleigh realizó un viaje con la intención de buscarla. Se dice que esta ciudad, que estaría en la actual Venezuela, está llena de oro y riquezas.

Envió a su hijo con un grupo de exploradores con nada más que los relataos fantásticos como guía. Una vez llegaron, fueron asesinados por los nativos.

Por lo que Raleigh fracasó, pero hizo un mapa de El Dorado basándose en los relatos de los indígenas, sin embargo, cuando lo enseñó en la corte nadie lo tomó en serio y se arruinó.

El tesoro del Juan sin Tierra

En 1216, unos carruajes del rey de Inglaterra, Juan I o el Sin Tierra, se hundieron en un pantano cuando viajan de Lincolnshore a Norfolk. Se sabe que estaban repletos de joyas, monedas y muchos más objetos haciendo que el valor fuera de 60 millones de euros, pero nadie lo encontró a pesar de que el pantano se secó.

La Cámara de Ámbar

Una obra del siglo XVIII que desapareció durante la Segunda Guerra Mundial. Esta Cámara era una habitación construida por el zar de Rusia en la Palacio de Catalina y estaba forrada de oro, piedras preciosas y panales de ámbar haciendo que su valor fuera incalculable.

Durante la guerra, los nazis se llevaron todo lo que había y se rumorea que algunas de las piezas se las dieron, años más tarde, a Putin. Hoy en día, nadie sabe nada de los materiales de la Cámara, pero en el 2015 gracias a unas imágenes obtenidas de los túneles de la Baja Silesia (Polonia) se vio un convoy nazi donde se dice que podría estar todo este tesoro.