Detrás de la guerra

Todas las guerras tienen un lado oculto. Más de 50 años después de la última guerra mundial, creemos saberlo todo sobre los dos conflictos más sangrientos de la historia de la humanidad.


Pero detrás de la muerte y la destrucción, las tácticas militares, las victorias y las derrotas, se esconden muchas otras historias y secretos: la I Guerra Mundial fue la cuna del deporte moderno, el ordenador sería un invento imposible sin las aportaciones de Alan Turing para descifrar el código nazi y la II Guerra Mundial podría haber acabado de manera muy distinta si Hitler hubiera ganado la “guerra del petróleo”. Te descubrimos algunos enigmas que se esconden detrás de la guerra.

Estreno en exclusiva
Juegos de guerra
Miércoles 16 a las 22:50h
En medio de uno de los conflictos más sangrientos de la historia, cientos de soldados encontraron una nueva forma de enfrentarse al trauma de la guerra y el miedo a la muerte: jugando. Entre las trincheras, a pocos metros del campo de batalla donde silbaban balas y estallaban bombas, se oía también el vitoreo de los soldados aficionados al fútbol, al boxeo o al atletismo. Organizaron ligas y campeonatos, premios y medallas, y al igual que en la guerra, hubo vencedores y vencidos. Sembraron la semilla de lo que conocemos hoy como el deporte organizado y dieron su vida para que otros pudieran seguir jugando.

Estreno en exclusiva
Hitler y la guerra del petróleo
Miércoles 23 a las 22:50h
Poco después del inicio de la II Guerra Mundial, las reservas de combustible de la Alemania Nazi están a punto de agotarse. La guerra relámpago llevada a cabo por los tanques y aviones de Hitler, amenaza con agotar todas las reservas. Su única esperanza es conquistar Bakú, capital de Azerbaiyán y el mayor productor de petróleo del mundo. Pero los soviéticos prefieren borrar la ciudad del mapa, antes que entregársela a los enemigos del III Reich.

Estreno en exclusiva
Descifrando el código nazi
Miércoles 30 a las 22:50h
Alan Turing fue uno de los héroes más importantes de la II Guerra Mundial. Era también un ser asocial, obsesivo y anti-bélico. Condenado en su momento por su condición sexual, persecución que le empujó al suicidio, hoy es reconocido como uno de los padres de la informática moderna y una de las personas más importantes del siglo XX. Su sueño sigue siendo el de muchos ingenieros y una de las hazañas que pueden marcar el rumbo de la humanidad: construir un cerebro artificial. El primer paso hacia esa meta fue construir un ordenador para descifrar Enigma, el sistema de encriptación nazi, y poner fin a la II Guerra Mundial.