Fallece el primer hombre con un corazón artificial

En la noche del 23 al 24 de marzo de 1983 en el Centro Médico de la Universidad de Utah (Estados Unidos) falleció Barney B. Clark, tras sobrevivir 112 días con un corazón artificial. Clark era un dentista de Seattle que padecía una grave patología cardíaca por la que se hallaba desahuciado. Sabiendo que no podría sobrevivir aceptó someterse a la operación experimental de implantación de un corazón artificial que le propuso el equipo médico dirigido por el doctor William C. de Vries. La intervención, que tuvo lugar el 2 de diciembre y duró cerca de 9 horas, suponía una oportunidad esencial para el avance de la investigación cardiológica. Clark consciente de ello aceptó someterse a la operación y, aunque no sin complicaciones, logró sobrevivir más de tres meses.