El 29 de noviembre del año 2001 el mundo de la música recibía un duro golpe. George Harrison, el guitarrista de los Beatles, falleció en su casa de Los Ángeles. Autor de canciones como Here comes the sun, Taxman, Love you to o la célebre Something, Harrison fue pieza indispensable del cuarteto británico, si bien no alcanzó la popularidad de John Lennon y Paul McCartney. Fuertemente influido por el hinduismo y la espiritualidad oriental, Harrison llegó a introducir el sitar entre los instrumentos empleados por el cuarteto para hacer música rock. Tras la disolución de los Beatles en 1970, prosiguió su carrera en solitario alcanzando importantes éxitos con temas como My sweet lord o Give me love. El fallecimiento del músico fue recibido con consternación en todo el mundo y muy especialmente en Liverpool, ciudad natal del guitarrista y cuna del famoso grupo británico, en cuyo Ayuntamiento ondeó la Union Jack a media asta.
