Ley para la Reforma Política

A las 21:28 horas del jueves 18 de noviembre de 1976 el presidente de las Cortes, Torcuato Fernández Miranda, declaraba solemnemente ante el pleno: «Queda aprobado el proyecto de Ley para la Reforma». Así se culminaba el proyecto más ambicioso y personal del presidente Adolfo Suárez, que había jurado su cargo el 5 de julio anterior. Su aprobación suponía la habilitación de recursos legales y políticos que hacían posible el tránsito desde un régimen dictatorial a otro democrático en España. Hasta llegar a ese momento el gobierno tuvo que hacer frente a varios obstáculos, como lograr que el proyecto pasase por el Consejo Nacional del Movimiento y la propia aprobación en las Cortes. El 15 de diciembre siguiente la ley fue apoyada por una amplísima mayoría en un referéndum. Su aprobación fue uno de los momentos más delicados y decisivos de la Transición española.