Monica Seles, apuñalada

Tal día como hoy del año 1993 la fulgurante carrera de la tenista de origen serbio Monica Seles se vio truncada por un inesperado ataque. Seles, que por entonces había alcanzado el número uno del tenis mundial femenino, se encontraba disputando un partido de cuartos de final en el Torneo de Hamburgo contra la búlgara Magdalena Maleeva cuando fue apuñalada por un desconocido. La tenista estaba sentada en su silla aprovechando una pausa del partido cuando repentinamente lanzó un grito. Günter Parche, un perturbado mental obsesionado con la también tenista Steffi Graf, acuchilló a Seles para lograr que su ídolo recuperase el número uno que ésta le había arrebatado. Aunque la herida de unos dos centímetros que le causó en la espalda no puso en riesgo la vida de la tenista, Seles tardaría años en recuperarse de las consecuencias psicológicas del atentado.