Tal día como hoy de 1903 los hermanos Wilbur y Orville Wright lograron convertir en realidad uno de los sueños más antiguos de la humanidad: volar. Ambos hermanos habían fundado una compañía de producción y reparación de bicicletas en 1892. Compartían un vivo interés por el vuelo, por lo que comenzaron a investigar y a desarrollar inventos que financiaban con sus ingresos. Desde 1900 empezaron a hacer pruebas anualmente en una zona apartada de Carolina del Norte, donde en 1903 experimentaron con su último prototipo, el Flyer, un biplano con un motor ligero y hélices de propulsión que habían fabricado con sus propias manos. La mañana del 17 de diciembre, con Orville a los mandos, el Flyer voló 36,6 metros durante 12 segundos, pero en los tres vuelos posteriores que realizaron ese día llegó a recorrer 260 metros en 59 segundos. La historia de la aeronáutica moderna había comenzado.
