Portazo al sacerdocio femenino en la Iglesia Católica

Tal día como hoy de 1995 la Iglesia Católica hizo público un documento aprobado por la Congregación para la Doctrina de la Fe y sancionado por el papa Juan Pablo II el 28 de octubre anterior. El documento zanjaba las dudas sobre si se podía considerar definitiva la decisión publicada por el papa en una carta pastoral de mayo de 1994, por la que afirmaba que la Iglesia Católica no podía otorgar el sacerdocio a las mujeres. La Congregación, presidida por el cardenal alemán Joseph Ratzinger (posterior papa Benedicto XVI) estableció que lo dictaminado por el papa era irrevocable e infalible, ya que pertenecía al «depósito de la fe», el máximo nivel de certeza teológica inmediatamente por debajo de los dogmas. Este hecho significaba que ningún papa posterior podría cambiar la decisión de Wojtyla. La polémica en torno a un posible sacerdocio femenino católico había crecido como la espuma a raíz de la decisión favorable de la Iglesia Anglicana.