En el programa Su primer año te ayudamos a solucionar las dudas que te surgen con la llegada de un bebé a la familia. Te damos consejos para el cuidado del recién nacido y solventamos los principales problemas que surgen en sus primeros meses de vida.
En este capítulo la enfermera, Pepi Recio, nos explica el uso del libro de vacunas y la información que en él se anota.
Antes de vacunar a un niño, el equipo médico realiza una serie de preguntas a los padres para tener conocimiento del estado de salud del bebé y de los síntomas que ha tenido en anteriores vacunas.
Todos los datos sobre las vacunas, se apuntan en un registro vacunal, que se hace por duplicado. Las personas encargadas de vacunar al bebé deben rellenar los diferentes apartados que en este libro de vacunas aparecen, como el nombre de la vacuna, el lote al que pertenece, el nombre de la persona que se la ha puesto al bebé, etc.
Las vacunas que se están poniendo en la actualidad son muy poco reactógenas y muy inmunógenas. Uno de los síntomas y posibles efectos adversos que se tiene después de poner una vacuna al bebé, es la fiebre. Si dura más de 24 horas hay que acudir al pediatra.
Las vacunas se deben posponer si el bebé tiene fiebre, una enfermedad aguda o grave, pero no por un constipado.
La enfermera nos explica que los recién nacidos no deben de ir a ponerse las vacunas en ayunas y después de vacunarlos, los niños pueden ir a la guardería normalmente.
Pepi nos da un consejo para que la prueba del talón les resulte menos dolorosa a los niños.
