¿Te gusta llevar los postres como regalo a tus anfitriones más queridos? En la clase de hoy, nuestro profesor Sergio Fernández te enseña como podrías quedar como el invitado perfecto. Y eso, con recetas deliciosas y fáciles de hacer: Mermelada de mango, naranja y jengibre y trufas variadas.
¿Sabías que la mermelada proviene de los intentos de los antiguos romanos de conservar la fruta? En antigua Roma empezaron a conservar la fruta añadiéndola en miel e hirviéndola hasta conseguir la consistencia deseada. La miel era el único edulcorante hasta que los árabes introdujeron azúcar a los europeos.
Pelamos las frutas y las troceamos. Las añadimos a un cazo con el azúcar y el jengibre pelado y cortado.
Cocinamos a fuego medio durante 40 minutos. Agregamos el agar agar, volvemos a levantar el hervor y retiramos del fuego.
Podemos pasar la mermelada por un pasa purés si la queremos sin trozos.
La metemos en los botes esterilizados y colocamos boca abajo para que se el vacío se selle mejor.
Conservamos en un lugar seco hasta el momento de abrir.
La trufas son un postre delicioso que siempre triunfa y son fáciles de hacer. Aquí te dejamos dos versiones para tus comidas familiares.
Para los dos tipos de trufas seguiremos el mismo proceso. Derretimos los chocolates y lo mezclamos con la nata. Pasamos a un bol y dejamos enfriar en la nevera 2h.
Boleamos las trufas de chocolate blanco con ayuda de unas cucharas y las pasamos por el polvo de chuche con sabor frambuesa. Para este polvo podemos coger cualquier dulce que esté duro y torturarlo hasta conseguir un fino polvo.
Hacemos el mismo proceso con las trufas de chocolate rebozándolas en pistachos triturados.
Guardar en una caja y disfrutar.
Para las trufas de chocolate blanco:
105 g de nata 35% de materia grasa
300 g de chocolate blanco
Chuches con sabor frambuesa trituradas
Para las trufas de pistacho y chocolate:
160 ml de nata 53% de materia grasa
150 g de chocolate negro
110 g de chocolate con leche
1 puñado de pistachos enteros
4 puñados de pistachos triturados
En la clase de hoy te hemos enseñado la manera más fácil de ser un invitado perfecto y a alegrar cualquier comida o cena familiar con los platos simples, baratos y deliciosos. ¿Te consideras un invitado perfecto? ¿Compruébalo en el siguiente test!